Los antojos son una señal
- Dr. Kate Kresge
- 3 may
- 6 Min. de lectura
Antojos: Lo que tu cuerpo realmente podría estar diciéndote
Los antojos angustian a muchos de mis clientes, especialmente cuando intentan seguir un plan alimenticio y sienten que se están desviando de un patrón de alimentación que desean seguir. Si alguna vez has tenido un antojo cuando estás completamente lleno y sabes que no necesitas comida, probablemente te hayas preguntado: ¿por qué estoy deseando algo ahora?
La ciencia de los antojos es fascinante. Podría ser que tu cuerpo esté pidiendo algo, ya sea un nutriente específico, agua u otro tipo de alimento. O, podría ser que tu cuerpo te esté avisando de que algo no está del todo bien. Francamente, también podría ser simplemente que estás deseando un alimento que es simplemente delicioso y fácil de querer.
No importa la causa, entender la ciencia detrás de los antojos puede empoderarte para responder a las necesidades de tu cuerpo de manera compasiva y equilibrada. Bonus: ¡incluso podría ayudarte a descubrir un problema médico que ni siquiera sabías que tenías!
En esta publicación, exploraremos algunas de las causas comunes de los antojos y cómo abordarlas puede ayudarte a lograr una vida más equilibrada y nutritiva. Compartiré formas en las que puedes probar ciertas condiciones y desequilibrios de nutrientes, así como algunos suplementos que pueden ayudar a restaurar el equilibrio.
1. Las Deficiencias de Nutrientes Pueden Desencadenar Antojos
Hierro
Es común que las personas experimenten antojos cuando carecen de nutrientes esenciales. Por ejemplo, la deficiencia de hierro puede llevar a antojos de alimentos específicos como carne roja o verduras de hojas verdes. Si has estado deseando alimentos ricos en hierro, tu cuerpo podría estar señalando que necesita más de este nutriente vital, que es esencial para la producción de energía y el funcionamiento cerebral (Hingorani et al., 2007).
Cómo probarlo: Los niveles de hierro se pueden probar con un análisis de sangre simple que mide los niveles de hemoglobina o ferritina. Si estás notando antojos frecuentes de carne roja o te sientes fatigado, esta puede ser una prueba importante sobre la que hablar con tu proveedor de atención médica.
Opciones de suplementos: Si se encuentra que tienes bajo nivel de hierro, un suplemento como sulfato ferroso o un suplemento de hierro suave basado en alimentos podría ser útil. Siempre es importante consultar con tu proveedor de atención médica para encontrar la dosis adecuada para ti, ya que el exceso de hierro puede causar otros problemas de salud y síntomas incómodos como el estreñimiento.
Magnesio
El magnesio es otra deficiencia común que puede causar antojos, especialmente por chocolate. Los niveles bajos de magnesio pueden llevar a la necesidad de alimentos ricos en azúcar, ya que el cuerpo busca energía rápida (Barbagallo & Dominguez, 2010).
Cómo probarlo: Los niveles de magnesio se pueden evaluar mediante análisis de sangre, pero ten en cuenta que el magnesio se almacena en los tejidos y huesos, por lo que los niveles en sangre no siempre brindan toda la información. Una prueba mineral integral puede proporcionar más información sobre tu estado de magnesio.
Opciones de suplementos: El glicinato de magnesio o el citrato de magnesio son formas populares que son más suaves para el sistema digestivo. Tomar magnesio antes de acostarse también puede apoyar la relajación y el sueño, lo que puede ayudar con los antojos relacionados con el estrés o la privación del sueño.
2. Resistencia a la Insulina y Antojos
Cuando la resistencia a la insulina está presente, el cuerpo tiene dificultades para procesar la glucosa correctamente, lo que lleva a fluctuaciones en los niveles de azúcar en sangre que pueden desencadenar antojos de alimentos ricos en azúcar o carbohidratos. Las personas con resistencia a la insulina pueden experimentar antojos mientras su cuerpo señala la necesidad de energía rápida para compensar los niveles desequilibrados de glucosa (Farhadnejad et al., 2017).
Cómo probarlo: La resistencia a la insulina se puede evaluar mediante una prueba de insulina en ayunas o un panel metabólico integral, que mide los niveles de azúcar en sangre e insulina. Otra prueba útil es la prueba de hemoglobina A1c, que proporciona información sobre el control de azúcar en sangre a largo plazo.
Opciones de suplementos: Suplementos como el picolinato de cromo e incluso Akkermansia han mostrado algo de promesa para ayudar a equilibrar los niveles de azúcar en sangre, aunque se necesita más investigación. Siempre habla con tu proveedor de atención médica antes de agregar suplementos, especialmente si estás tomando medicamentos para la diabetes o la resistencia a la insulina.
3. Antojos Emocionales: Estrés y Soledad
Los antojos no siempre se relacionan con la nutrición física, también pueden estar impulsados por necesidades emocionales. Cuando estás estresado, solo o experimentando emociones negativas, tu cuerpo puede desear alimentos reconfortantes como una forma de lidiar con la situación. Esto es particularmente común en momentos de estrés elevado, donde la comida sirve como una fuente temporal de alivio o distracción.
La investigación ha demostrado que el estrés puede aumentar los antojos de alimentos altos en grasa y azúcar, lo que activa los centros de placer del cerebro y alivia temporalmente la incomodidad (Adam & Epel, 2007). De manera similar, la soledad a menudo se asocia con antojos de comida, especialmente de bocadillos dulces o salados que brindan consuelo emocional (Dube et al., 2013).
Cómo evaluar: No hay una prueba de sangre específica para los desencadenantes emocionales, pero identificar patrones en tus hábitos alimenticios puede ser un buen comienzo. Si notas que tiendes a desear ciertos alimentos durante momentos de estrés o tristeza, esto podría ser una señal de comer emocionalmente. A veces, llevar un diario o registrar tu estado de ánimo junto con tus elecciones alimenticias puede proporcionar información valiosa. Hablar con un coach o terapeuta también puede ayudarte a obtener información sobre tus patrones y abordar las causas subyacentes del estrés y la soledad para que puedas sanar y vivir mejor.
Estrategias de apoyo: Aunque no hay suplementos que traten directamente los antojos emocionales, los adaptógenos como la albahaca santa (tulsi) pueden ayudar a apoyar la capacidad del cuerpo para lidiar con el estrés. Las prácticas de mindfulness, el movimiento regular y la conexión con otros también pueden ser muy útiles para abordar los antojos emocionales.
4. Antojos Adictivos: Alimentos Procesados y Exorfinas
Si estás deseando alimentos altamente procesados, especialmente aquellos que son ricos en azúcar, grasa y sal, podría ser útil considerar que algunos alimentos están específicamente diseñados para ser altamente sabrosos. Estos alimentos están creados para activar los centros de recompensa en tu cerebro, lo que hace que sean difíciles de resistir y lleva a antojos que pueden sentirse casi incontrolables.
La investigación ha mostrado que los alimentos ricos en azúcar, grasa y sal pueden actuar de manera similar a las sustancias adictivas. Estos alimentos desencadenan la liberación de dopamina, un neurotransmisor asociado con el placer y la recompensa, lo que puede hacer que quieras seguir comiéndolos (Higgs & Cooper, 2014). Para algunas personas, esto puede llevar a un ciclo de antojos y consumo que es difícil de romper.
Además, existe una teoría de que los alimentos que son ricos en caseína (en los productos lácteos) y gluten (en el trigo) pueden contener compuestos llamados exorfinas. Las exorfinas son péptidos similares a los opioides que se liberan cuando la caseína o el gluten se descomponen durante la digestión. Estos péptidos son similares a nuestras propias endorfinas endógenas, compuestos conocidos por inducir sentimientos de placer o consuelo.
Cómo evaluar: Si tienes antojos recurrentes de alimentos procesados, ricos en azúcar o en grasas, podría ser una señal de que tu cuerpo está respondiendo a las vías de recompensa en tu cerebro. Si también experimentas problemas digestivos como hinchazón, gases o malestar, podrías considerar realizarte pruebas para el síndrome del intestino permeable a través de pruebas de laboratorio especializadas.
Estrategias de apoyo: Para abordar los antojos relacionados con aditivos alimentarios y exorfinas, reducir la ingesta de alimentos altamente procesados y enfocarse en opciones integrales y densas en nutrientes puede ayudar. Si sospechas de un intestino permeable o tienes preocupaciones digestivas, suplementos como L-glutamina, zinc carnosina y probióticos pueden apoyar la reparación del intestino.
5. Un Enfoque Holístico para la Nutrición
Los antojos son una parte natural de ser humano y no son inherentemente malos ni vergonzosos. De hecho, son simplemente señales de que tu cuerpo necesita algo, ya sea nutrición física, descanso, hidratación o apoyo emocional. Responder a los antojos con amabilidad y curiosidad, en lugar de juicio, es esencial para crear una relación más saludable con la comida y tu cuerpo.
En mi consulta, utilizamos pruebas de laboratorio avanzadas, historias completas y un enfoque holístico para ayudar a las personas a descifrar las señales que sus cuerpos están enviando. Al usar las pruebas adecuadas, podemos identificar deficiencias de nutrientes, abordar condiciones como la resistencia a la insulina y explorar los desencadenantes emocionales de los antojos. El objetivo es satisfacer tus necesidades nutricionales, físicas y emocionales de manera que apoye tu bienestar general.
Cuando tu cuerpo y mente están bien nutridos, puedes lograr cosas poderosas y asombrosas. Quiero que te sientas pleno, equilibrado y equipado para prosperar.
Con calidez y bienestar,
Dra. Kate